En el Día Internacional de la Mujer, Islandia anunció que será el primer país del mundo en obligar a las empresas a demostrar que ofrecen el mismo salario a sus empleados con independencia de su género, su etnia, su condición sexual o nacionalidad, y aplicará el Estándar de Salario Igualitario a todas las compañías con más de 25 empleados para asegurar que ofrecen el mismo salario por trabajos de igual valor.
El ministro de Igualdad y Asuntos Sociales, Thorsteinn Viglundsson, dijo que es «el momento adecuado para hacer algo radical sobre este asunto». «Derechos iguales son derechos humanos», dijo. El Gobierno se puso como meta tener aplicada la medida en todo el país para el 2022.
Según el Foro Económico Mundial, Islandia ocupa el primer lugar en el mundo en igualdad de género, pero aun así, las islandesas todavía ganan en promedio de 14 a 18 por ciento menos que los hombres. «Queremos mostrar al mundo que la erradicación de la brecha salarial entre los géneros es un objetivo alcanzable y esperamos que otras naciones sigan el ejemplo para adoptar la norma de igualdad de pago en los próximos años», manifestó el ministro.