Con frecuencia, muchas personas no van al dentista hasta que el dolor se hace insoportable. Prefieren esperar hasta el último momento, cuando ya ningún milagro quitó la molestia para asistir al dentista, por miedo a someterse a las agujas que harán posible el paso de la anestesia para el esperado cese del dolor.
Hoy ese miedo es parte del pasado gracias a avanzados equipos que permiten realizar procedimientos en forma más rápida, precisa y casi imperceptible. La doctora Daniela Mora, odontopediatra de Americandental explica que este sistema es mucho menos invasivo y aterrador “ya no ocupamos un aparato plateado con una aguja que provoca miedo en los pacientes con tan solo mirarla”.
Otra de las ventajas que destaca la especialista en comparación a la anestesia convencional, es que es posible anestesiar solo un diente, “se duerme sólo la pieza dentaria a tratar, por lo tanto el paciente no se va con la cara dormida ni caída y lo niños no tienden a morderse el labio, una de las consecuencia con la que tuvimos que lidiar por años. Su alto grado de precisión permite seguir con las actividades diarias son las típicas molestias de la anestesia tradicional”.
Gracias a esta nueva tecnología, es posible realizar tratamientos en menor tiempo y evitando molestias y dolor en el paciente. Mantener una buena salud bucal, no sólo permite una linda sonrisa, sino que ayuda a mantener saludable todo el organismo.