Cuando sus futuros humanos fueron a adoptar a su hermana, la gatita Zoë los hechizó para que la adoptaran a ella también. Tenía un truco: en su pecho se ve una gran marca negra en forma de corazón. Lo gracioso es que nadie se había dado cuenta antes de esta señal tan anatómicamente correcta. Sus humanos quedaron encantados y se llevaron juntas a ambas hermanas. Cuando Zoë creció, también lo hizo su pelaje y su corazón, y se ha ganado el sobrenombre de “fluff” y Reina de Corazones.
Zoë y su hermana Izzy tienen su propia cuenta de instagram, en las que cuentan con unos 75.000 seguidores. Al principio, Zoë era la más popular, pero Izzy la está igualando gracias a su cara expresiva e irresistible.
Ambas son cruces de pelicorto inglés, igualmente adorables pero con distintas personalidades. Izzy es intrépida y aventurera, mientras que Zoë es muy curiosa pero más cautelosa. Ambas son muy cariñosas, entre ellas y con sus humanos.