La hipnosis permite solucionar de manera rápida y eficaz este problema, mediante la modificación de los paradigmas de la persona.
Ya nos encontramos en plena temporada de vacaciones, en donde la ola de calor nos ha azotado con fuerza, y son muchas las personas que esperan ansiosamente poder disfrutar de playas, ríos y piscinas.
Sin embargo, esta acción que parece muy común para la gran mayoría de las personas, para otros es una verdadera pesadilla, por lo que evitan a toda costa lugares o situaciones donde se vean enfrentados al agua. Nos referimos a quienes padecen de hidrofobia.
El psicólogo e hipnoterapeuta de Hipnosalud (www.hipnosalud.cl), José Luis Rojas, explica que la fobia al agua representa un miedo persistente y anormal al agua o a nadar, el que puede presentarse espontáneamente o debido a algún evento traumático. “Como cualquier fobia, produce un estado altamente ansioso y de miedo profundo con todo lo relacionado con el agua, incluso hay personas que les cuesta tomar una ducha”, agrega el profesional.
Asimismo, Rojas señala que esto sucede aunque la persona tenga conciencia de que el agua no representa ninguna amenaza para su integridad y que también puede afectarle si alguien lo salpica o lo moja.
Los síntomas de este problema se manifiestan a través de una serie de reacciones físicas, más allá de la ansiedad, tales como palpitaciones, pulso acelerado, presión en el pecho, debilidad muscular en piernas y brazos, mareos, etc.
Hipnosis como tratamiento efectivo
Es posible curar ésta y otras fobias a través de la hipnosis, debido a que la técnica se basa en un estado de focalización de la atención, que es el que permite estar más abierto a los cambios, de manera rápida y fácil. “Se entra en un estado profundo de relajación, en el que se enfoca y se dirige la atención al problema que se quiere tratar”, indica José Luis
“Cualquier fobia es susceptible de ser superada mediante la hipnosis, ya que lo que se hace es modificar los paradigmas que la persona tiene con relación al agua u otro elemento fóbico”, añade.
Rojas explica que “la hipnosis siempre es autohipnosis. Nadie tiene el poder de hipnotizar a nadie, lo que uno hace es guiar a la persona para que se autohipnotice y es eso lo que produce la cura de cualquier fobia o del problema que se quiera tratar”.
El psicólogo indica que esta condición puede mejorar de manera bastante rápida, en general. “Con 2 ó 3 sesiones ya hay un importante avance, pero entre una y otra sesión el paciente debe escuchar audios que le ayudarán a modificar las creencias arraigadas a nivel inconsciente”.
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