Un total de 144 periodistas y trabajadores de medios de comunicación murieron este año en 31 países durante el ejercicio de su profesión, lo que representa la peor cifra en los últimos diez años, según el balance anual que publicó este miércoles la Campaña Emblema de Prensa (PEC), reporta DW.
De acuerdo con los datos de esta organización, que defiende la libertad de prensa, el año pasado fallecieron 135 comunicadores, 138 en 2014, 129 en 2013, 141 en 2012, 107 en 2011, 110 en 2010, 122 en 2009, 91 en 2008, 115 en 2007 y 96 en 2006.
La PEC ha incluido en el recuento a los 20 periodistas brasileños que fallecieron en el accidente de avión en Colombia el pasado 29 de noviembre mientras acompañaron al equipo de fútbol Chapecoense, dado que contabiliza tanto a los periodistas intencionalmente asesinados en el ejercicio de su profesión como a los muertos por accidente.
Tres muertes por semana
«2016 ha sido un año muy difícil para la seguridad de los periodistas. El precio a pagar por la información sigue siendo muy alto, con 2,8 periodistas asesinados cada semana», declaró el secretario general de la PEC, Blaise Lempen, en un comunicado.
Entre 2007 y 2016 un total de 1.232 trabajadores de los medios de comunicación han sido asesinados, de acuerdo con la misma fuente. Sin los 20 periodistas brasileños fallecidos en el reciente accidente aéreo, Irak y Siria encabezan la lista de los países más peligrosos para la profesión, el primero con 16 víctimas y el segundo con 14.
Seguidos de Afganistán y México, ambos con 12 víctimas, el Yemen con 9 muertos y Guatemala con 7 asesinatos. La India y Pakistán registran cada uno 6 víctimas, Turquía 5 y Brasil 4, que lo lleva al décimo puesto.
América Latina, segundos
Dos tercios de las víctimas se contaron en países que están en guerra. Por regiones e independientemente del accidente aéreo en Colombia, Oriente Medio y el Norte de África fueron las regiones de mayor riesgo, con un total de 44 muertos este año.
América Latina y Asia comparten el segundo lugar con 28 muertos en cada región. Europa, con 13 periodistas fallecidos este año, se sitúa por delante de África subsahariana (10 muertos) y de Norteamérica (un comunicador fallecido).