El Gobierno declaró el lunes emergencia nacional a raíz de la sequía y la falta de agua, medida que permitirá movilizar recursos económicos de alcaldías, gobernaciones y del Ejecutivo para superar la crisis que afecta a varias regiones del país.
El Presidente Evo Morales, en conferencia de prensa, dijo: «Esta mañana aprobamos con el gabinete el Decreto 2987 mediante el cual, artículo uno, tiene por objetivo declarar situación de emergencia nacional debido a la sequía y déficit hídrico en diferentes regiones provocadas por fenómenos climáticos».
El jefe de Estado informó que este año es el más caluroso de los últimos 100 años, además que la sequía que vive el país es la más dura.
En ese contexto destacó el impacto de los programas ‘Mi Agua’ y ‘Mi Riego’, que permitieron que la producción cuente con agua y por ende que los precios de los alimentos no se incrementen y no haga falta la provisión.
Sin embargo, en lo inmediato, manifestó que se formaron equipos de trabajo para paliar el tema y atender la demanda, principalmente de los barrios de La Paz.
Explicó que los ministerios se encargarán, por separado, de la disposición de cisternas y tanques en los lugares más críticos, como también de la perforación de pozos y de la captación de nuevas aguas.
Morales indicó que «esta emergencia de agua hay que convertirla en una oportunidad para mayores inversiones en el país».
Anunció que realizará un sobrevuelo para verificar el estado de las lagunas y ver alternativas para incorporar agua al sistema, como se lo hizo ayer con 40 litros por segundo de Palcoma.
El jefe de Estado recomendó «racionar» el agua para prevenir situaciones aún más críticas y no reaccionar después cuando el recurso hídrico falte incluso por días.