Más que fascinante se me ha hecho leer esta segunda edición (corregida y aumentada) del libro «El acto de las palabras. Estudios y diálogos con Octavio Paz«, del literato cubano Enrico Mario Santí.

Reeditado en 2016 y publicado originalmente en 1997, este libro es una valiosa antología de ensayos y prólogos de Santí sobre las principales obras de Octavio Paz, que incluye dos entrevistas a este célebre escritor y una completa introducción para la edición española de «El laberinto de la soledad».

Pero esta segunda entrega, además de corregir los escritos originales, contiene otros once textos no incluidos en la primera edición.

El primero de ellos, «Siete tesis para recordar a Octavio Paz», es un bello homenaje al centenario del gran poeta y ensayista. Dice en algunas de sus líneas:

«No es la persona quien construye el lenguaje; es el lenguaje quien construye a la persona. Y lo mismo vale para la poesía, el poema y el poeta. Es la poesía la que habla a través de todos ellos».

Otro de los nuevos textos que destaco es «Poesía e historia», que analiza la concepción de Paz sobre la poesía en relación a la historia humana, por medio de la cual buscaba «escribir una poesía que fuese poética sin dejar de ser histórica, y que fuese histórica sin caer en la propaganda ideológica que habían practicado mucho de sus mayores, y hasta algunos contemporáneos».

Si bien al principio fui renuente de adquirir un libro cuya primera edición ya tenía, también quería conocer los posibles cambios del autor en sus análisis anteriormente publicados, sobre todo de obras como «La llama doble» (el más bello ensayo que he leído sobre el amor erótico), así como su crítica posterior a la muerte del Nobel mexicano.

Claramente, el ideario artístico y político de Octavio Paz -que para mí es la más rica combinación de romanticismo y liberalismo- apareció en mi vida para quedarse.