El expresidente de Brasil Luiz Inácio Lula da Silva será juzgado por cargos de corrupción y lavado de dinero. Esto, luego que el juez responsable de la investigación, Sergio Moro, aceptara la denuncia formal presentada la semana pasada por la Fiscalía.
El magistrado explicó que el exmandatario será indagado por las sospechas de haber aceptado sobornos por 3,7 millones de reales (1,11 millones de dólares) como parte del gigantesco escándalo de la petrolera Petrobras.
Lula negó cualquier delito, señalando que «prueben una corrupción mía y me iré a pie para ser encarcelado».
Esta causa no es la primera abierta contra el expresidente brasileño, puesto que tiene pendiente otra investigación federal en Brasilia por un supuesto delito de obstrucción a la justicia.