Cualquier dispositivo de almacenamiento de datos puede fallar por una serie de factores. El fuego, la humedad, una interferencia electrónica o un golpe son algunos de los factores que pueden dañar este tipo de aparatos. Por eso, la recomendación es respaldar doblemente la información, ya sea en la nube o en una segunda unidad.

¿Qué hacer si la unidad de almacenamiento empieza a fallar? Los expertos aseguran que los primeros pasos son cruciales y pueden marcar la diferencia entre recuperar o perder absolutamente todos los datos. Lo básico es respaldar la información en un segundo dispositivo inmediatamente, además de no conectar el dispositivo ni intentar ocupar un software de recuperación de archivos si el disco duro presenta un zumbido, puesto que el ruido es un indicador de daño físico interno.

Prevenir es mejor que curar

Western Digital, empresa líder de almacenamiento, elaboró una serie de consejos para prevenir este tipo de accidentes y evitar que información valiosa se pierda para siempre.

· Utiliza softwares actualizados para la seguridad de los datos, como firewalls y antivirus, además de tener respaldada tu información antes de actualizar el sistema operativo de tu computador.

· Escanea toda la información entrante, como correos electrónicos, sitios web y descargas. Con esta acción evitarás que un virus se instale en tu equipo.

· Conecta tu computador y/o servidores de datos a un sistema de alimentación ininterrumpida (UPS) para proteger tu equipo de subidas de tensión o cortes eléctricos.

· Evita cualquier descarga estática cuando toques o manipules tu dispositivo de almacenamiento, especialmente en ambientes excesivamente secos.

· Crea tu Plan de Backup: para respaldar tu información de manera regular, ya que según los expertos esta es probablemente la mejor forma de evitar la pérdida de tus datos. La recomendación es programar una copia de seguridad automática. Dispositivos como WD My Cloud o el WD My Passport Ultra ofrecen softwares para realizar copias de seguridad automáticas y programables, compatibles con Windows y Mac. Basta con elegir el día, la hora y la frecuencia con que se desea realizar estas copias de seguridad y se podrá estar tranquilo sabiendo que se conserva una segunda copia de los archivos que verdaderamente importan.