Don Jorge Burgos, desde su salida del Gobierno se ha ido sacando las pieles que lo cubrían, mostrando sus verdaderos ropajes: los conservadores y anticomunistas propios de los duros años ’70. Sus últimas declaraciones son, incluso, más duras que las de los personeros de la oposición y sólo comparables con las de Hermógenes Pérez de Arce o Gonzalo Rojas. Más aún Burgos dio por muerta la Nueva Mayoría.
Pero Burgos, que tiene muy buenas relaciones con RN y se destacó –mientras estuvo en Palacio- por “cultivar” amistades con cierta prensa a quienes deleitaba con constantes filtraciones y comentarios en off, siempre estuvo haciendo ruido, pero aún así tuvo el favor de La Moneda.
Ya conociendo el –pareciera ser- el verdadero pensamiento ideológico del ex Jefe de Gabinete del gobierno de la Nueva Mayoría, le ha traído un rédito que buscaba: Levantarse como un referente para llegar La Moneda.
El senador Jorge Pizarro, el mismo que se fue al mundial de Rugby mientras su región era devastada por un terremoto, salió a levantar la candidatura de Burgos “Es un buen nombre porque tiene credibilidad y hay sectores que se sentirían muy tranquilos con él”.
Similar opinión tiene el senador Ignacio Walker quien lo calificó como “gran alternativa” y asegurando que “la DC tiene que levantar una candidatura presidencial y Jorge Burgos es una gran alternativa”. En esta misma línea el senador Andrés Zaldívar (Un símbolo de la vieja decé) no solo apoya las declaraciones de Burgos sino que además dice que “tiene todas las condiciones y atributos para ser candidato presidencial”.
Un poco más moderado en sus dichos fue el vicepresidente de la colectividad Matías Walker sostuvo que “Qué duda cabe que Burgos no es un militante más de la DC, sino una persona con mucho liderazgo y que aparece bien en las encuestas”.
En este escenario queda clara la crisis de gobernabilidad que enfrenta la Democracia Cristiana que hoy es presidida por la senadora Carolina Goic que sin duda se debilita con estas declaraciones.
Detractores
Uno de los octogenarios líderes progresistas decé, Mariano Ruiz-Esquide, publica una dura carta sobre Burgos en la que dice: “El Mercurio publicó el domingo una muy clara y contundente entrevista de mi camarada y amigo Jorge Burgos. Sin embargo no comparto ni su contenido ni su forma…El hecho de su reclamo como ex reciente ministro del Interior y el valor de ser publicado en su diario agrava el daño al partido (DC), produciendo confusión sobre materias pendientes que no lo autorizan para asumir conducciones que no respetan el camino institucional. El reiterado afán de pautear desorienta al partido desde fuera, lo que no es buen camino…Una pequeña observación final. Chile no es un tren descarrilado ni mucho menos” sentencia.