“Para serle franco, el Partido Comunista, participando con el nivel de influencia programática que ha tenido en este gobierno, creo que no le hace bien al país. Lo que no significa que no sea un actor válido de la política chilena. Es mi opinión: han sido más bien una complicación. Yo por lo menos lo viví así”, señala Jorge Burgos, ex ministro del Interior de la Presidenta Bachelet, de quien, se termina de desmarcar y dice además que la Nueva Mayoría se debe terminar con este gobierno.
Así, Jorge Burgos el decé del ala más conservadora de la colectividad de la flecha roja, deja de manifiesto que nunca estuvo convencido del todo de la Nueva Mayoría y le irrita sobremanera tener que sentarse en la misma mesa con los comunistas. Ya liberado de tal “martirio”, este domingo Burgos mostró su verdadera cara, esa que simplemente no comulga con la actual forma de gobernar y menos con el PC, así lo da a conocer en una entrevista publicada este domingo y dirigida a las alicaídas élites chilenas que leen El Mercurio.
En esta misma entrevista, muy bien estructurada y pensada, se termina de desmarcar de la Presidenta Bachelet y literalmente proclama a Ricardo Lagos Escobar como la carta para la próxima presidencial pero bajo el concepto de Concertación: “Espero que lo convenzamos (a Lagos)…es más, me gustaría que pudiera ser” dice Burgos Varela.
Sobre el momento político, Burgos es incluso más crítico que la propia oposición “Para usar una metáfora ferroviaria, el país se ha descarrilado; hay que ponerlo otra vez en la vía (…) Por ejemplo, hay que ponerlo en la vía del crecimiento…eso es algo esencial”.
¿Alineado con Lagos o simplemente un subdito más?
En la entrevista se le pregunta sobre la crisis de confianza, argumentación usada con vehemencia por Ricardo Lagos, a lo que Jorge Burgos responde: “Si hay algo en que coincido con el ex Presidente Lagos, es en que las confianzas están severamente quebradas. Ese quiebre ha traspasado la política, lo empresarial, hasta la moral. El problema viene de atrás, aunque ha habido una caída mayor en el último tiempo. Devolver la confianza es algo esencial…A la gente le interesa que la institucionalidad se respete y funcione, y en ese sentido tenemos algo que mostrar, y en ese sentido tenemos algo que mostrar, y que es mérito del Gobierno y también de la oposición: en Chile, lejos de ocultarse, la corrupción se ha atacado…Pero hoy la relación entre dinero y política va a ser mucho más difícil y lo mismo una colusión”, señala Burgos.
DC: Esperando el momento
A Burgos se le pregunta sobre su colectividad y el rol que jugará en ella, pero socarronamente dice que “soy un simple militante. La presidenta del partido me ha pedido colaborar en un comité estratégico en las municipales…Eso me entusiasma. Pero sí, además quiero influir con ideas”, sostiene.
Burgos es claro en delinear lo que espera de él y de la DC: “Me gustaría influir en la DC cuando llegue el momento de decidir qué va a hacer en el período presidencial que viene, y ojalá con una mirada aún más a largo plazo. Soy un convencido de que la DC le viene mejor, y a Chile le viene mejor, que gobierne una coalición de centroizquierda, cuyos pilares esenciales sean las grandes corrientes socialcristianas y socialdemócrata”, asegura.
En esta línea Jorge Burgos explica que “Por eso la DC, antes de decidirse por un candidato de sus filas o no se sus filas, tiene que definir el tipo de gobierno que queremos ofrecerle a Chile. Esa discusión es entre aquellos que quieren una “Nueva Mayoría II” y los que creemos que la Nueva Mayoría termina con este gobierno. Esa es la definición que hay que tomar”.
Consultado sobre el papel que juega el PC en un escenario como el actual, Burgos dice fuerte y claro: “Para serle franco, el Partido Comunista, participando con el nivel de influencia programática que ha tenido en este gobierno, creo que no le hace bien al país. Lo que no significa que no sea un actor válido de la política chilena. Es mi opinión: han sido más bien una complicación. Yo por lo menos lo viví así”.