La Asociación Nacional de Funcionarios Técnicos, Administrativos y Auxiliares de la Corporación de Asistencia Judicial (CAJ) Región Metropolitana dio cuenta de una situación que los tiene en estado de alerta y que afecta al servicio que brinda la institución.
«Desde el de 30 de Marzo de 2016, se ha estado trabajando en una Mesa de Estructura, en conjunto con las tres asociaciones y representantes de la Dirección General (Jefe de Gabinete, Asesor de Recursos Humanos, Asesor de Auditoria y el Depto. de Planificación y Control de Gestión), cuyo objetivo es buscar llegar a un consenso respecto de cual debiere ser la estructura ideal y los recursos de que debe disponer la institución«, comenzaron señalando los trabajadores.
«Para enfrentar los cada vez más crecientes requerimientos que hemos ido experimentando con el pasar de los años, contando con el financiamiento permanente que permita disponer de las y los funcionarios a nivel central y de centros, que permita una gestión acorde a las necesidades de nuestros usuarios, sin los debilitamientos que hemos experimentado este año calendario», agregaron.
«El día 24 de Junio nuestro Directorio se ha informado de que la DAJ (Depto. de Asistencia Jurídica del Ministerio de Justicia), y nuestros directivos institucionales, a espaldas de los dirigentes de las asociaciones, han elaborado otra estructura (Organigrama), de manera paralela a la que estamos trabajando, pretendiendo imponer dicha estructura, sin señalar en qué estudio técnico se basan tales elaboraciones, sin explicitar si dicha estructura da cuenta de las crecientes exigencias que tiene la institución y buscando validar dicha propuesta ante el Consejo de la CAJ, argumentando que ha sido conversada con sus trabajadores, lo que no es efectivo«, puntualizaron.
Según consignan, el 28 de junio de 2016 la asociación consultó sobre la efectividad de que se estuviera impulsando un cambio de estructura orgánica del servicio, a lo cual respondieron: “No tenemos conocimiento de aquello”.
«No obstante lo anterior, ante la insistencia de nuestros dirigentes AFTADAJ, el Jefe de Finanzas, señor Alexis Alé, manifiesta y reconoce que sí se está trabajando en un nuevo organigrama, que se le ha consultado al respecto por parte del Ministerio de Justicia, particularmente por el Departamento de Asistencia Jurídica (DAJ), y trata de excusarse aduciendo que se le consulta en calidad de su “experiencia docente”, desentendiéndose de su cargo institucional, lo que nos parece del todo improcedente, no constándonos si esta consulta que se le hace obedecería entonces, a una asesoría privada, con lo que aquello significa», detallaron los funcionarios.
El dirigente Hugo Gutiérrez Tarifeño conversó con Infogate expresando su molestia: «Hasta cuándo los funcionarios públicos sonmos botín del gobierno de turno, hasta cuándo los funcionarios somos esclavos de los partidos políticos. Independiente de tu posición polítiva y de si te gusta un gobierno o no tú eres funcionario, un empleado del Estado y haces lo mejor por Chile, y la directiva que se supone que tiene dar los alineamientos para poder trabajar está involucrado en un hecho completamente desleal con todos los funcionarios de la institución«.
A través de un comunicado interno, la Asociación Nacional de Funcionarios Técnicos, Administrativos y Auxiliares de la Corporación de Asistencia Judicial ahondaron: «Como dirigentes, no estamos en condiciones de avalar iniciativas que se hacen a espaldas de las y los funcionarios de la institución, a espaldas de sus dirigentes, que buscan retrotraer a la Corporación de Asistencia Judicial a la realidad de dotación del año 2008 (aproximadamente 700 funcionarios), dotación del todo insuficiente para responder a todas las nuevas exigencias que se han generado en casi 8 años, insuficiencia que se traduce en deterioro de nuestras condiciones y cargas de trabajo y, en la calidad del servicio que brindamos a las y los chilenos.
«En el transcurso de este año, hemos padecido un deterioro de todas las dotaciones de un nivel que se había alcanzado y que permitía disponer de cargas y condiciones laborales para enfrentar los desafíos propios del acceso a la justicia en el 2016, todos conocemos algún centro jurídico o alguna unidad regional o departamental que se haya visto deteriorada en sus dotaciones y, a la vez, vemos como se está deteriorando el clima laboral (producto de la sobrecarga del trabajo) y se está desmejorando la atención a los usuarios, de manera que malamente podemos avalar procesos de reestructuración que, a primeras luces, implican un retroceso y que, además, se hacen a espaldas nuestras», concluyeron.