En un sondeo de Plaza Pública Cadem -realizado entre miércoles y viernes de la semana pasada, – los ministros del área económica obtuvieron un 4,2 de nota promedio, en una escala de 1 a 7. La mejor evaluación fue un 4,4 para los titulares de Energía, Máximo Pacheco, de Medio Ambiente, Pablo Badenier, y de Hacienda, Rodrigo Valdés.
Los ministros de minería, Aurora Williams, de Obras Públicas, Alberto Undurraga, y de Agricultura, Carlos Furche alcanzaron un 4,3. Mientras el ministro de Economía, Luis Felipe Céspedes, tuvo un 4,1, y su par de Trabajo, Ximena Rincón, se ubicó en el piso del rango azul con un 4,0. El único con nota roja, con un 3,9, fue el ministro de Transportes y Telecomunicaciones, Andrés Gómez-Lobo.
LOS ARGUMENTOS DE LAS NOTAS
Complicado ha estado el sector Transportes. A la quinta postergación del tren expreso Santiago-Rancagua, se suman las protestas de los taxistas por la regulación de Uber y los problemas financieros de Subus y Alsacia, operadores del Transantiago. A eso hay que agregar que el sistema capitalino de locomoción pública alcanzó una evasión cercana al 30%.
Por otro lado, un 47% de los encuestados atribuyó a las decisiones y gestión del equipo económico del gobierno y el ministerio de Hacienda, la principal responsabilidad del bajo crecimiento que afecta al país. En tanto, un 34% sindicó al mercado y a los empresarios y un 15% a la situación económica internacional.
Empleo
El nivel de conocimiento de los ministros económicos lo lideró la ministra del Trabajo, Ximena Rincón con un 78%, quien, superó por más de 20 puntos porcentuales a su más cercano, Pacheco, que obtuvo un 56%.
Les siguen Valdés y Undurraga (ambos con 51%), y Gómez-Lobo (46%). La nómina la cierran Céspedes (41%), Badenier (26%), Furche (22%) y Williams (18%).
En materia laboral, el nivel de desempleo se ubicó como la principal preocupación económica del país, con un 25%. Le siguen la baja del precio del cobre (19%) y el bajo crecimiento económico (15%).
A su vez, menos de la mitad (48%) de la muestra total del sondeo dijo estar tranquilo en cuanto a la estabilidad de su trabajo o del empleo del jefe de hogar. En octubre de 2014 este índice había alcanzado un 58%. Quienes se manifestaron preocupados por esta variable avanzaron desde 39% a 50% en el mismo lapso.
La desocupación en el Gran Santiago se situó en 7,6% a junio, según la encuesta del Centro de Microdatos de la Universidad de Chile. La cifra representó una caída de 1,8 punto porcentual sobre la medición de marzo, cuando se disparó a 9,4%. Pese a esto, en 12 meses tuvo un alza de 1,1 punto porcentual.
En otro ámbito, el 61% de los participantes estimó que el crecimiento económico se mantendrá en los próximos tres meses; un 25% dijo esperar una disminución y un 12%, un aumento. En el plano de los salarios, un 80% dijo que los sueldos delos trabajadores se mantendrían, un 7%, que se elevarían, y un 12%, que bajarían.