En vez de llevar un vestido de novia tradicionalmente blanco,optó por un vestido negro realmente impresionante, y su marido, Jaryd, este día tan importante llevaba una chaqueta elegante de un color granate, una camisa estampada, una humilla negra y un pantalón de cuero. Los Cachias dicen que lo hicieron por ellos mismos, pero Sophie precisa su explicación:
“La primera cosa que quiero decir es que mi elección no tiene NADA que ver con la tradición de que “los vestidos blancos son para las vírgenes,” dice Cachia a Motherish. “Es evidente, y mi hijo Bobby de 15 meses es una prueba, que para mí éste tren ya ha pasado. Solamente pienso que, teniendo experiencia y conociendo mi generación, si realmente los vestidos blancos los llevaran sólo las chicas vírgenes, habría mucha más variedad de colores entre las novias.”