«Taylor Swift como nunca antes la has visto», ha sido el título elegido por Vogue USA para presentar la nueva imagen de la cantante. Mantiene su ya característico corte de pelo bob, pero de rubia ha pasado a rubia platino. La diva del pop aparece irreconocible en la fotografía y muchos se preguntan ya si es una nueva víctima del retoque fotográfico. Lo que pretendía ser un punto y aparte estilístico en la carrera de la artista con objeto de sus 10 años de trayectoria musical, se ha convertido en motivo de burlas en Internet y un meme de Swift ha corrido como la pólvora por las redes sociales: la comparan con el personaje de Hansel —interpretado por el actor Owen Wilson— en la película Zoolander.
Ajena a las críticas, la estadounidense, de 26 años, ya ha dejado claro en su Instagram que es la portada que más le gusta de todas las que ha protagonizado nunca. A la cover de la revista le acompaña un reportaje fotográfico ideado por el dúo de fotógrafos de moda Mert Alas y Marcus Piggot, con estilismos de Tonne Goodman. Vestidos con tonos metalizados —la apuesta fuerte de esta temporada primavera/verano—, plumas y botines con tacones imposibles a cargo de las firmas internacionales como Yves Saint Laurent, Vetements, Michael Kors, Marc Jacobs o Marchesa. Las imágenes demuestran que de aquella adolescente estrella de la música country no queda ya ni el tono de cabello.
En la entrevista, Swift asegura que no sabe cuál será el siguiente paso en su carrera: «Es la primera vez en 10 años que no sé lo que voy a hacer. Con todas las cosas increíbles que me ocurrieron el año pasado… He decidido que era hora de vivir la vida sin la presión que me impongo a mí misma para crear», explica.
Los seguidores de la cantante pueden seguir tranquilos porque, asegura, nunca va a dejar de escribir canciones. «La cosa es que, en mi caso, se me podrían ocurrir tres cosas en las próximas dos semanas y volver al estudio y de repente el próximo álbum ha comenzado». Aunque eso no sucederá por ahora: «De verdad quiero tomarme un tiempo para aprender cosas. Tengo algunos pequeños objetivos conmigo misma», se excusa Swift al mismo tiempo que bromea con la idea de convertirse en una experta en coctelería.
