Albert Einstein solía repetir sus frases en voz alta continuamente. Un dato que por sí solo podría confirmar que este hábito es característico de personas inteligentes, pero que sin embargo nunca ha sido suficiente a la hora de demostrar una teoría apoyada por muchos y denostada por tantos otros.
Sin embargo, un reciente estudio de los psicólogos Daniel Swigley y Gary Lupyan han conseguido confirmar nuestras sospechas: hablar solo es algo muy beneficioso y típico de personas con una gran inteligencia emocional.
Durante el experimento, los investigadores dieron a 20 personas seleccionadas el nombre de una serie de objetos (cosas simples como «pan» o «manzana») que debían encontrar en un supermercado guardando silencio absoluto. Acto seguido, se realizó la misma prueba, pero permitiendo a los participantes repetir el nombre del objeto que debían encontrar en voz alta. Los resultados revelaron que la búsqueda era mucho más efectiva cuando los sujetos podían enunciar el nombre del elemento, ya que hablar en voz alta activa la memoria y te ayuda a organizar tu mente para conseguir ese objetivo.
En resumen, hablar en voz alta activa una serie de canales sensoriales que generan emociones concretas. Es por eso que actividades como leer en voz alta tu lista de metas vitales o de tareas de la semana te prepara y te estimula para conseguirlas.
Fuente:Vogue.es