El año de fabricación de los vehículos con sello verde que tendrán restricción vehicular permanente, a partir de 2017, aún está siendo definido por el gobierno. Esto luego de que hoy miércoles culminara la consulta pública sobre las medidas que serán parte del futuro Plan de Descontaminación de Santiago por material particulado fino (MP 2,5).

El programa antiesmog establece que 340 mil vehículos (dos dígitos del total del parque automotor capitalino) deberán paralizar cada día entre mayo y agosto, para ayudar a reducir los índices de contaminación. Según el inventario oficial de emisiones, el sector del transporte genera un 41% de la polución en la cuenca.

El ministro de Medio Ambiente (s), Marcelo Mena, explicó que paralelo al proceso de participación ciudadana, el gobierno está afinando una fórmula para aplicar la medida. “Está claro que los vehículos menos limpios contaminan diez veces más que los que hoy no poseen restricción. Estamos convencidos de que el camino es limpiar el parque vehicular”, dijo Mena.

Originalmente se proponía que  la restricción se aplicara a los vehículos registrados antes de 2012, pues su convertidor no funciona de manera óptima. “Esto podría tener una modificación en cuanto al año. Además, se podría aplicar una restricción de acuerdo a la norma de emisión del automóvil (con tecnología Euro) o, derechamente, que no haya ningún año exento. Eso se va a decidir luego de la consulta”, indicó.

La Segunda Encuesta Nacional del Medio Ambiente reveló que un 87% de las personas está a favor que los vehículos no salgan a la calle en jornadas críticas de esmog.

Desde este jueves, el Ejecutivo tiene un plazo de 120 días para diseñar el plan, el que deberá ser firmado por la Presidencia para luego ingresar a Contraloría. Se espera que esté implementado en 2017.

“Es una exigencia que no solo trae beneficios cuando hay mala calidad de aire, sino que también sirve para acelerar la reconversión tecnológica”, añadió Mena.

Los detractores

Las agrupaciones de automovilistas rechazan la idea de paralizar durante el invierno. “Es una disposición discriminatoria, pues fija un determinado año y no contempla la tecnología o tamaño del vehículo, lo que podría ser una alternativa”, afirmó Alberto Escobar, gerente de estudios del Automóvil Club de Chile. Agregó que deberían endurecerse las medidas para el sector de los camiones, pues su carga de emisiones es mayor.

Respecto a ese punto, Carlos Dumay, presidente de la Cámara Nacional de Comercio Automotor de Chile, comentó que “hay cuestiones inconcebibles, como la restricción o bien el impuesto verde a los vehículos. No tiene pies ni cabeza”.

La preocupación de la población se aprecia en que el 50% de las consultas, de un total de 700 hechas en la participación ciudadana del plan, correspondieron a dudas respecto a la paralización de las fuentes móviles.

Motos 

El gobierno también pretende incluir la restricción a dos dígitos al día a las motocicletas, lo que es criticado por los usuarios. Al respecto, el subsecretario Mena señaló que, con este sector, “estamos trabajando para encontrar un diseño que beneficie la reconversión del parque de las motocicletas, pues algunas contaminan diez veces más que las que cuentan con mayor tecnología”.