Protege tu cuello:
Desde ahí el pelo crece a un ángulo más inclinado que el vello facial, por lo que es difícil de remover. Por eso, alterna la dirección del afeitado, dice «Buck Dutton, de The Art of Sharing». Primero hazlo en la dirección del crecimiento y después a contrapelo.
Brochas de afeitado:
Con una brocha se reparte mejor la crema de rasurado y prepara mejor el pelo antes de removerlo, afirma Dutton. Compra una de pelo suave y denso. Aplica mediante una ligera presión y haz pequeños círculos.
No presiones demasiado la piel:
Evita demasiada presión sobre la piel cuando pasas la maquina de afeitar, esto aumenta el riesgo de cortadas. Es por eso que Dutton sugiere cambiar las cuchillas cada cinco o siete afeitadas. Cuando termines, deja colgado la máquina, para que las bacterias y piel muerta se escurran junto con el agua.
Afeitarse en la ducha:
Afeitarse mientras te bañas es una buena opción, porque el agua caliente ablanda los vellos. Aplica un gel de afeitar sin alcohol. Déjalo actuar unos dos minutos. Luego, comienza de afuera hacia adentro, haz trazos largos y deja para el final las áreas de la barbilla, el cuello y los labios.
After Shave en balsamo:
Protege tu piel con una crema hidratante o bálsamo. Busca idealmente productos con antioxidantes que combatan el envejecimiento prematuro.