La policía de Bélgica detuvo este miércoles a un sospechoso de haber participado en los ataques con explosivos ocurridos el martes en Bruselas, Bélgica, que dejaron 34 muertos. En un principio, el diario belga DH anunció que el arrestado en el barrio de Anderlecht era Najim Laachraoui, identificado como uno de los participantes en las explosiones registradas en el aeropuerto de Zeventem, quien es buscado por la policía desde hace casi cuatro meses por su vinculación con los atentados de noviembre pasado en París. El presunto terrorista de 25 años y retornado de Siria, donde viajó en febrero de 2013, es uno de los cómplices del terrorista más buscado de Europa, Salah Abdeslam, quien fue detenido el viernes pasado Bruselas. La Fiscalía belga informó en un comunicado que las autoridades están tras sus pasos por haber alquilado una casa en el municipio de Auvelais, más de 70 kilómetros al sur de Bruselas, que sirvió para preparar los atentados, y que la policía registró el 26 de noviembre, 13 días después de los ataques del ISIS en la capital francesa. «Restos de ADN de Najim Laachraoui fueron encontrados tanto en el piso arrendado en Auvelais como en el departamento de Schaerbeek utilizado por el grupo terrorista», señala la Fiscalía. La policía ya había hallado huellas de Abdeslam y restos de explosivos en dicho piso de Schaerbeek, un barrio de Bruselas al que solo un canal separa de Molenbeek, el barrio de fuerte presencia musulmana en el que creció Abdeslam y del que provienen algunos de los autores de los ataques de París. Laachraoui era conocido hasta ahora por las fuerzas de seguridad como Soufiane Kayal, la identidad falsa con la que arrendó la vivienda y con la que fue detectado en un control en la fronteras de Hungría y Austria el 9 de septiembre pasado, dos meses antes de los atentados, indica el medio. De los tres hombres que fueron identificados ese día en la inspección policial, todos ellos con pasaportes falsos, Laachraoui era hasta la mañana de este miércoles el único que permanecía prófugo.