Pascal Cotte afirma que debajo de la famosa pintura se esconde otro retrato. El científico asegura que ha pasado los últimos 10 años analizando la pintura con tecnología de luz reflectaste. Y en una reconstrucción muestra otra imagen de una modelo mirando hacia un lado. El Museo de Louvre, en París, se negó a comentar sobre las afirmaciones de Cotte.
Sin sonrisa
Aparentemente, la modelo anterior no muestra ni la famosa mirada directa de la pintura que cuelga en el Louvre, ni hay rastros de la enigmática sonrisa que ha intrigado a los amantes del arte por más de 500 años.
Las afirmaciones de Cotte son controvertidas y están dividiendo la opinión de los especialistas en el artista renacentista. Cotte es cofundador de la empresa Lumiere Technology en París y en 2004 el Louvre le dio acceso a la pintura.Cotte es pionero de una técnica llamada Método de Amplificación de Capas (MAC), que utilizó para analizar la Mona Lisa.
Ésta funciona «proyectando una serie de luz intensa» sobre la pintura, dice Cotte.
Una cámara después toma medidas de los reflejos de la luz y, con esas medidas, Cotte asegura que fue capaz de reconstruir lo que ha ocurrido entre las capas de la pintura. La Mona Lisa ha sido objeto de varios análisis científicos durante más de medio siglo. Técnicas más recientes incluyen inspecciones de infrarrojo y escáner multiespectral. Pero el científico afirma que su técnica es capaz de penetrar más profundamente en la pintura.
«Ahora podemos analizar exactamente lo que está ocurriendo dentro de las capas de pintura y podemos pelar todas ellas como si fuera una cebolla», asegura. «Podemos reconstruir toda la cronología de la creación de la pintura», añade.
Este sería el rostro que esconde la pintura más famosa de Da Vinci.
Fuente: BBC