El autor de estos cuentos, narra que un día, copa en mano, frente a la insistencia de un amigo dijo: ¿para qué escribir y publicar si a nadie le interesa? ¿Para qué escribir cuentos si son el hermano pobre de la novela? Dos preguntas fundamentales que todo aquel que tenga algún tipo de afición a la escritura seguramente se ha hecho.
Bien, sobre el primer cuestionamiento, hay constatación empírica de que aún en la era digital, de la era de lo netamente audiovisual, de la inmediatez; el contar una historia no es y nunca será un emprendimiento anacrónico, hay historias que sólo podrían ser relatadas con pluma. Suficiente con eso.
El argumento a lo segundo, quizá pueda resultar en exceso soberbio e incluso megalómano, pero solo imaginemos el rostro desencajado de los grandes cuentistas de la historia al escuchar una imputación de este tipo: Chejov, Guy de Maupassant, Borges, Cortázar, Bolaño, Fonseca, Kafka, y tantos etcéteras. ¿Qué dirían? Creo que ya quedó claro.
Soledades urbanas es un conjunto de relatos variopintos, donde el hilo conductor no es especialmente claro, adornados con la sutileza artística de una gran ilustradora, que plasmó sus sensaciones en una hoja, luego de leer cada uno de ellos.
Acerca del autor:
Germán Abarca es un escritor independiente oriundo de Chañaral y este es su primer libro de cuentos, escogidos desde un puñado de historias, con el objetivo declarado de mostrar en la palabra al ser humano actual, y cómo, cada vez más aglomerados, se vive, voluntariamente o no, cada vez más aislado.
Dónde adquirirlo:
Pánico Ediciones- Galería de arte, librería. Av. Italia 1439 Local 2, Providencia, Santiago.
