Simplemente Donald Trump cautivó a un electorado norteamericano que sintió removerse su fibra más conservadora y menos tolerante con -por ejemplo- los latinos; un fenómeno que hará replantearse el relato a los candidatos republicanos que, inesperadamente, se han visto sobrepasados por el discurso frontal y políticamente incorrecto del candidato empresario que le gana electores a los demás contendores.
En unos minutos más se realizará el primer debate televisivo de los conservadores, en Cleveland (Ohio) con los 10 candidatos más respaldados en los sondeos.
El díscolo del partido del elefante, se ha transformado en una incógnita en cuánto a la duración de su liderazgo en las encuestas, que hoy le son favorables y lo tienen encabezando la lista de prepresidenciables.
Según un sondeo de la empresa de análisis on line Topsy, Trump se impone en Twitter por sobre Bush, su más cercano competidor y la que era coniserada la carta segura de Partido Republicano. En julio último, su nombre ha aparecido en 3,3 millones de mensajes en la red, según la consultora Topsy. Jeb Bush, es el siguiente republicano más popular en Twitter pero apenas llega al 22% de esa cifra: 727.000.
“El apoyo a Trump es real. Refleja una amplia desapego con el statu quo político”, le dijo Geoffrey Skelley, analista del Centro de Política de la Universidad de Virginia, al corresponsal del diario español «El País».
Skelley es famoso por sus aciertos en pronósticos electorales y pone en duda que Trump sea, finalmente, el ungido por los republicanos.
Veremos como Trump enfrenta a los contendores que son políticos profesionales en el debate de esta noche en los Estados Unidos.
