El subsecretario del Interior, Mahmud Aleuy, hizo un resumen de la devastación provocada por el temporal que afectó al norte del país y que antes pasó por el centro del territorio nacional ocasionando millonarios daños, dejando en evidencia un problema permanente en Chile, como es la construcción y uso de áreas de riesgo señalando: «No se puede seguir construyendo en zonas de riesgo en nuestro país (…) Hay que construir entre todos un esquema de trabajo escalonado para que impidamos que en el futuro la gente construya en zonas de riesgo».
Ya se habían realizado insistentes advertencias sobre este problema luego del terremoto y tsunami de 2010, donde el mayor daño se ubicó en el borde costero, el mismo que fue azotado en la costa central y norte durante el reciente temporal, volviendo a colocar en el debate nacional la necesidad de evitar seguir usando estas áreas de alto riesgo.
Existen diversos estudios científicos y técnicos que permiten a las autoridades e instuciones como municipios, tener claramente identificadas las áreas de riesgo. Por ejemplo las llamadas «Cartas de inundación» eleboradas por el Servicio Hidrográfico y Oceanográfico de la Armada (SHOA) permitirían -efectivamente- mantener a raya la devastación y los daños a la infraestructura, pero ni constructoras ni inmobiliarias pareciera importarles estos documentos, menos a los departamentos de obras municipales que son los que otorgan los permisos.
Balance de la catástrofe
El subsecretario Aleuy entregó un catastro sobre los damnificados y lo daños tras el paso del temporal: “Tenemos 592 albergados, desafortunadamente 6 fallecidos, y las personas que aún no tienen suministro eléctrico ascienden a 33.858, de las cuales el número mayor pertenece a Valparaíso con 10.403; el daño mayor de viviendas que no están en condiciones habitables asciende a 214 a nivel nacional, de las cuales Coquimbo concentra la mayor parte con 104 inmuebles”.
Con respecto a Tocopilla, Aleuy explicó que “tenemos un sector de la ciudad muy dañado, por el hecho e que hay al rededor de 100 viviendas destruidas y la primera opción que nosotros tomamos siempre es reponer los servicios básicos, y en este caso nuestro problema mayor no es ese,sino el barro”. Por lo tanto, el subsecretario destacó que “lo que se está haciendo con brigadas y con la propia ayuda de la gente es sacar el barro”.