Esta tarde noche, tras una extenso debate que se dividió en dos sesiones, finalmente por ochos votos a favor y cinco en contra, la Comisión de Salud de la Cámara de Diputados, que preside Juan Luis Castro (PS), aprobó la idea de legislar en torno al proyecto de aborto en tres causales: inviabilidad fetal, violación y riesgo de vida de la madre.
Los parlamentarios acordaron también dar hasta el 28 de agosto para recibir las indicaciones respecto al proyecto con el fin de poder despacharlo la primera semana de septiembre.
La cita que preside el diputado Juan Luis Castro (PS), debía votarse el pasado 7 de julio, sin embargo, una sesión del Consejo Nacional de la Democracia Cristiana (DC), en que se debatió un documento crítico sobre la propuesta, motivó una solicitud del partido al Ejecutivo para que se postergara esta deliberación, lo que fue aceptado.
Así votaron:
A favor
Juan Luis Castro (PS), presidente de la comisión: «Hoy le estamos devolviendo el derecho a las mujeres a decidir, nadie puede sustituir la decisión de la mujer libre y soberana».
Karol Cariola (PC): «Quiero aclarar que los que votamos a favor estamos profundamente a favor de la vida y somos los mismos que en dictadura defendimos los asesinatos a mujeres embarazadas».
Cristina Girardi (PPD): «Lo mínimo que se merecen las mujeres de este país es que se les respete el derecho a decidir»
Marcela Hernando (PRSD): «En ningún caso acá se permite el aborto libre y este proyecto no obliga a nadie a interrumpir su embarazo».
Manuel Monsalve (PS): «Acá no se está legislando para aprobar la interrupción del embarazo en caso de niños con síndrome de down, somos diputados y es nuestro deber hablar con seriedad y claridad».
Marco Antonio Núñez (PPD): «Esta iniciativa nos saca de la lista de los cinco países que todavía penaliza el que se quiera salvar por ejemplo la vida de la madre».
Gabriel Silber (DC): «No es un proyecto de promoción al aborto, especifica las tres causales y así se sustituye la voluntad del Estado y se le da la decisión a las mujeres. Nosotros como democracia cristiana queremos mejorar este proyecto en su discusión en particular».
Víctor Torres (DC): «Tenemos que hacernos cargo como Estado de darle todas las condiciones a las mujeres para que puedan decidir y es por eso que como bancada DC hemos pedido que se establezca en este proyecto el acompañamiento a las mujeres que decidan seguir con su embarazo».
En contra:
Gustavo Hasbún (UDI): «Acá se produce un conflicto entre la libertad de la mujer y el derecho a la vida».
Javier Macaya (UDI): «No cumple el mandato constitucional de respetar el derecho a la vida del que está por nacer. Yo estoy orgulloso de votar en contra».
Nicolás Monckeberg (UDI): «Sorprende que este congreso y este estado de Chile otorgue este derecho antes de entregar un acompañamiento que proteja la vida».
Jorge Rathgeb (RN): «Este proyecto es impreciso y ambiguo».
Marisol Turres (UDI): «Es un debate mentiroso porque sabemos por la experiencia en otros países, como ha partido este proyecto cuando se aprueba y cómo ha terminado. Todos losque estamos acá estamos gracias a que nuestras madres nos dieron el derecho a la vida».
Ronda de especialistas
La Comisión de Salud, durante la mañana recibieron a los psiquiatras Francisca Decebal-Cuza, Susana Cubillos, Mónica Kimelman y Rodolfo Philippi. Durante la tarde, los diputados recibieron al director del Centro de Medicina Embrionaria Experimental y Salud Materna, Elard Koch, además de los médicos gineco obstetra, Fernando Abarzúa, Andrea Hunneus y Andrea Schilling.
El ministro de la Secretaría General de la Presidencia, Nicolás Eyzaguirre, la ministra de Justicia, Javiera Blanco, la ministra directora del Servicio Nacional de la Mujer, Claudia Pascual, y la ministra de Salud, Carmen Castillo, fueron citados a la instancia.
La historia del Proyecto
Michelle Bacheelt en octubre de 2013, presentó en su Programa de Gobierno, la idea y la necesidad de contar con una “ley de derechos sexuales y reproductivos acorde a las realidades y opciones de las personas” en la cual proponía la “despenalización de la interrupción voluntaria del embarazo en caso de peligro de la vida de la madre, violación o inviabilidad del feto”.
El 31 de enero de este año la Presidenta firmó el proyecto que se envió al Congreso para garantizar el cumplimiento de ese objetivo programático, argumentando que “no podemos obligar a las mujeres a que carguen solas por no poder decidir por una ley”.