260 megavatios aportará la planta de almacenamiento de energía más grande del mundo al Sistema Interconectado Central, para generar unos 1700 GWh al año, luego que el gobierno chileno autorizara su construcción en la región de Atacama.
Emplazada en una de las zonas más áridas del planeta, la planta comenzaría sus operaciones en 2019, según un comunicado difundido por Solar Reserve, empresa a cargo de las operaciones.
El problema de las centrales solares convencionales es que solo operan cuando hay sol. En el caso del proyecto llamado Copiapó Solar, corresponde a un sistema híbrido, que incluye tecnología de torres de concentración equipadas con almacenamiento térmico que funciona con la energía de la sal fundida, en conjunto a paneles solares fotovoltaicos, permitiendo que el sistema opere de manera continua tanto de noche como de día.